La eterna sombra de Johan
Han pasado casi 25 años desde que Johan Cruyff dejó de ser entrenador del Barça. Su salida provocó un seísmo sin precedentes y fue el inicio de los ismos modernos (nuñismo, cruyffismo, laportismo...). Un cuarto de siglo en los que la historia del club ha cambiado, colocándose por momentos en el trono del planeta futbol merced a una serie de equipos (Rijkaard y sobre todo el Pep Team) que dejaron momentos para la eternidad. Si Johan echase la vista atrás, se reiría. Si, lo haría ya que, a pesar de sus rarezas y sus salidas de tono, se ha comprobado que él tenía razón. Si como jugador, Johan dejó huella, como entrenador ha marcado a las nuevas generaciones, incluso habiendo pasado a mejor vida. Johan siempre fue un rebelde. Ya desde su época en el Ajax donde negoció sus contratos y se negó a fichar por el Real Madrid porque el Ajax había negociado a sus espaldas, marchándose al final al FC Barcelona, el rival del equipo blanco. Su compromiso y sus principios eran tan fuertes que llegó a